jueves, 12 de diciembre de 2013

Primeros Pobladores de América.


Es probable que los primeros pobladores hayan venido al continente americano desde el Asia hace más de 20 mil años. Al respecto, se han hallado algunas evidencias de este suceso, pero todavía no han sido aceptadas como verdaderas por la ciencia, haciendo que el hecho quede aún como una teoría más, aunque en cualquier momento puede ser confirmada de manera definitiva. Estos primeros cazadores asiáticos llegados a América continuaron su recorrido desde Alaska hacia el Sur, llevando una vida nómada. De esta manera se desplazaron por todo el continente y sus generaciones descendientes llegaron en menos de dos milenios hasta el extremo Sur (la Patagonia, en Chile), formando así la primera base antropológica americana, o sea de población propia de América. 
Estos primeros habitantes del continente lograron prolongarse en el tiempo, viviendo en condición de cazadores nómadas y también como recolectores de frutas, miel de abeja, huevos de aves, etc., durante varios milenios, hasta cuando se produjo el Sedentarismo, hace nueve mil años, en las diversas regiones geográficas del continente. Los descendientes de aquellos grupos humanos sedentarios dieron origen a las comunidades aborígenes que hoy conocemos en América. Podemos afirmar que América aborigen seguía un desarrollo humano diferente al de los demás continentes. En verdad, las comunidades originales tenían sus propias características sociales, llegando a formar verdaderos imperios donde reinaba, ante todo, la solidaridad. El comunitarismo primigenio avanzaba en el tiempo hasta que llegaron al continente pobladores de varias procedencias, que vivieron a imponer sus costumbres, truncando aquel proceso socio – económico y cultural autóctono.


Culturas Mesoamericanas.
México fue el asentamiento de algunas de las civilizaciones más antiguas y desarrolladas del hemisferio occidental. Existe evidencia de que una población dedicada a la caza habitó el área hacia el año 21000 a.C. o incluso antes. entre los primeros cultivos estuvieron la calabaza, el maíz, el frijol y el chile. La primera civilización mesoamericana importante fue la de los olmecas, quienes tuvieron su época de florecimiento entre el 1500 y el 600 a.C. La cultura maya, de acuerdo con la investigación arqueológica, alcanzó su mayor desarrollo al acercarse el siglo VI. Otro grupo, los guerreros toltecas, emigraron desde el norte y en el siglo X establecieron un imperio en el valle de México. Fueron los fundadores de las ciudades de Tula y Tulancingo y desarrollaron una gran civilización todavía evidente por las ruinas de magníficos edificios y monumentos.

Cultura olmeca
El antiguo pueblo de los olmecas del sur del golfo de México originó la más antigua civilización en Mesoamérica (México y América Central), y cuyo esplendor se fecha desde aproximadamente el 1500 hasta el 900 a.C. Su área central ocupó unos 18.000 km2, en las pantanosas selvas de las cuencas ribereñas de los actuales estados mexicanos de Veracruz y Tabasco.
 Su influencia se extendió gradualmente hasta las tierras altas de México, esto es, el valle de México, conocido como el Anahuác, y los actuales estados de Oaxaca y Guerrero, por lo que influyeron en otras culturas posteriores como la mixteca y zapoteca. Los olmecas iniciaron su andadura, durante el denominado período olmeca I (1500-1200 a.C.), con pequeñas aldeas costeras que practicaban una agricultura incipiente y mantenían el importante aporte de la caza y la recolección.
 El período olmeca II (1200-400 a.C.) comprende San Lorenzo, su centro más antiguo conocido, que fue destruido en torno al año 900 a.C. y sustituido por La Venta, una ciudad creada según un patrón axial que influyó en el desarrollo urbanístico de América Central durante siglos. Una pirámide de tierra apisonada de 30 m de altura, una de las más antiguas de Mesoamérica, estaba situada en el centro de un complejo de templos y patios abiertos.




     Cultura de Teotihuacán
El yacimiento arqueológico de Teotihuacán contiene los restos de la ciudad más antigua del continente americano, situado en el municipio mexicano homónimo, 45 km al noreste de la actual ciudad de México. El lugar fue ocupado por primera vez en los siglos I y II a.C. De ser un pequeño asentamiento pasó a convertirse en una importante ciudad en el siglo II d.C., hasta cerca del año 700 d.C. Se han formulado varias hipótesis para explicar su decadencia y posterior abandono: disensiones internas, cambios climáticos, o invasiones de pueblos del norte. Su población se dispersó por la región central de México y también en lugares apartados, llegando algunos a establecerse en los países que en la actualidad son los de El Salvador y Nicaragua. La ciudad ocupaba una superficie muy amplia, 21 km2, y llegó a estar poblada por 125.000 habitantes siendo considerada ya en ese entonces una de las ciudades más grandes del mundo. Sus notables monumentos incluyen las Pirámides del Sol y de la Luna, unas de las edificaciones más grandes jamás construidas, la Ciudadela, el templo de Quetzalcóatl y la Avenida de los Muertos, que es una amplia vía flanqueada por los restos de antiguos templos de casi 2.000 m de longitud. Los muros de algunos de ellos están decorados con frescos de color que representan temas mitológicos o religiosos.




Cultura Maya.
El Maya es un grupo de pueblos indígenas mesoamericanos perteneciente a la familia lingüística maya o mayense, que tradicionalmente han habitado en los estados mexicanos de Yucatán, Campeche, Tabasco y Chiapas, en la mayor parte de Guatemala y en regiones de Belice y Honduras.
El pueblo más conocido, el maya propiamente dicho, que da nombre a todo el grupo, ocupa la península de Yucatán. Entre los demás pueblos significativos se hallan los tzeltales de las tierras altas de Chiapas; los choles de Chiapas; los quichés, cakchiqueles, pokonchis y pokomanes de las montañas de Guatemala y los chortís del este de Guatemala y el oeste de Honduras. Todos estos pueblos formaban parte de una civilización y cultura comunes que, en muchos aspectos, alcanzó las más elevadas cotas de desarrollo entre los indígenas de todo el área mesoamericana. 
La agricultura ha constituido la base de la economía maya desde la época precolombina y el maíz es su principal cultivo. Los mayas cultivaban también algodón, frijol (poroto o judía), camote (batata), yuca y cacao. La cultura maya produjo una arquitectura monumental, de la que se conservan grandes ruinas en Palenque, Uxmal, Mayapán, Copán, Tikal, Uaxactún, Quiriguá, Bonampak, Tulún y Chichén Itzá, entre muchas otras. Estos lugares eran enormes centros de ceremonias religiosas. Los pueblos mayas desarrollaron un método de notación jeroglífica y registraron su mitología, historia y rituales en inscripciones grabadas y pintadas en estelas (bloques o pilares de piedra), en los dinteles y escalinatas y en otros restos monumentales. 
Los registros también se realizaban en códices de papel amate (corteza de árbol) y pergaminos de piel de animales. Entre los mayas, la cronología se determinaba mediante un complejo sistema calendárico. El año comenzaba cuando el Sol cruzaba el cenit el 16 de julio y tenía 365 días; 364 de ellos estaban agrupados en 28 semanas de 13 días cada una, y el año nuevo comenzaba el día 365. Además, 360 días del año se repartían en 18 meses de 20 días cada uno. Las semanas y los meses transcurrían de forma secuencial e independiente entre sí. Sin embargo, comenzaban siempre el mismo día, esto es, una vez cada 260 días, cifra múltiplo tanto de 13 (para la semana) como de 20 (para el mes). La religión maya se centraba en el culto a un gran número de dioses de la naturaleza. Chac, dios de la lluvia, tenía especial importancia en los rituales populares. 
                  


Cultura Tolteca
Los toltecas, pueblo nativo de México que emigró desde el norte de lo que ahora es México, tras la decadencia de la gran ciudad de Teotihuacán, y que estableció un estado militar en Tula, a 64 km al norte de la moderna Ciudad de México, en el siglo X d.C. Se pensó que su llegada marcó el cenit del militarismo en Mesoamérica, puesto que el ejército tolteca empleó su mayor potencia para dominar las sociedades vecinas. El pueblo tolteca creó una refinada cultura, que incluía conocimientos sobre la fundición del metal, el trabajo de la piedra, la destilación y la astronomía. Su arquitectura y su arte reflejan influencias de Teotihuacán y de la cultura Olmeca. Los restos de Tula, a veces llamada Tollan Xicocotitlán, incluyen tres templos piramidales, de los cuales el más grande está rematado por columnas de 4,6 m de altura en forma de estilizadas figuras humanas conocidos como "atlantes" (guerreros); se cree que estaba dedicado a Quetzalcóatl, la Serpiente Emplumada, deidad que los toltecas adaptaron de culturas anteriores y la adoraron como el dios del planeta Venus. 


Cultura Zapoteca.
Los zapotecas fueron uno de los pueblos que tuvieron un papel muy importante en el desarrollo cultural de Mesoamérica. Establecidos por lo menos desde un milenio antes de la era cristiana en la sierra, valle central y en el istmo de Tehuantepec, Oaxaca, los zapotecas recibieron la influencia de los olmecas. Eran éstos los creadores de la cultura madre que comenzó a florecer en las costas del golfo de México, en la región limítrofe de los actuales estados mexicanos de Veracruz y Tabasco. Hacia el siglo VI a.C. los zapotecas estaban en posesión de un sistema calendárico y también de una forma de escritura. De ello dan testimonio las centenares de estelas con inscripciones que se conservan en el centro ceremonial de Monte Abán. Dichas estelas se conocen como de ‘los danzantes’, ya que las posturas de las figuras humanas con las que se registran tales inscripciones, mueven a pensar que están bailando. 
En esa primera etapa del desarrollo zapoteca comenzaron a construirse tumbas de cajón o rectangulares en las que aparecen ofrendas y representaciones del dios de la lluvia conocido como Cocijo, deidad que habría de tener un lugar muy importante en el panteón zapoteca. En el que abarca desde el 300 a.C. hasta el 100 d.C., se dejó sentir la presencia de algunos elementos que más tarde se desarrollarían con mayor fuerza entre los mayas. De esa época provienen asimismo edificaciones más suntuosas, entre ellas las de varios juegos de pelota y algunos templos en Monte Albán y en otros lugares de Oaxaca como Yagul, Teotitlán, y Zaachila.

  
Cultura Mixteca.
El pueblo amerindio de los mixtecos de la familia lingüística otomanque, habitante de los actuales estados mexicanos de Oaxaca, Guerrero y Puebla. La cultura mixteca floreció en el sur de México desde el siglo IX hasta principios del XVI y sus miembros fueron los artesanos más famosos de México. Sus trabajos en piedra y en diferentes metales nunca fueron superados. 
Entre sus especialidades se podían citar los mosaicos de plumas, la alfarería polícroma decorada y el tejido y bordado de telas. Las contribuciones más importantes de los mixtecos son: los registros pictográficos en códices hechos sobre piel de venado de la historia militar y social que narran aspectos del pensamiento religioso, de los hechos históricos y de los registros genealógicos de su cultura; la orfebrería, cuyas muestras como pectorales, narigueras, anillos o aretes, demuestran que manejaron con maestría el oro trabajado con la técnica de la cera perdida, así como el labrado del alabastro, el jade, la turquesa y la obsidiana, entre otros. 
Entre los siglos XI y XII de nuestra época, los mixtecos adoptaron una influencia tolteca cuya característica civilizadora los motivó a buscar asentamientos más estables que los que habían tenido; se dedicaron a dominar a los zapotecas por medio de invasiones de sus tierras, guerras y alianzas políticas por matrimonios.


Cultura Azteca.
Los aztecas o mexicas fueron un pueblo que dominó el centro y sur del actual México, en Mesoamérica, desde el siglo XIV hasta el siglo XVI y que es famoso por haber establecido un vasto imperio altamente organizado, destruido por los conquistadores españoles y sus aliados tlaxcaltecas. Algunas versiones señalan que el nombre de ‘azteca’ proviene de un lugar mítico, situado posiblemente al norte de lo que hoy en día es México, llamado Aztlán; más tarde se autodenominaron mexicas.
Tras la caída de la civilización tolteca que había florecido principalmente en Tula entre los siglos X y XI, oleadas de inmigraciones inundaron la meseta central de México, alrededor del lago de Texcoco. Debido a su tardía aparición en el lugar, los aztecas-mexicas se vieron obligados a ocupar la zona pantanosa situada al oeste del lago. Los sacerdotes afirmaron haber visto todo eso al llegar a esta zona; como reflejo de la continuidad de esa tradición, hoy en día esa imagen representa el símbolo oficial de México que aparece, entre otros, en los billetes y monedas. Al aumentar en número, los aztecas establecieron organizaciones civiles y militares superiores. En 1325 fundaron la ciudad de Tenochtitlán, la ciudad floreció como resultado de su ubicación y del alto grado de organización. 
En la época en la que los españoles, capitaneados por Hernán Cortés (1485-1547), comenzaron la conquista en 1519, el gran mercado de Tlatelolco atraía a unas 60.000 personas diarias. Las mercancías llegaban a manos aztecas gracias a los acuerdos sobre tributos establecidos con los territorios conquistados. Muchas de esas mercancías se exportaban a otras zonas del Imperio azteca y a América Central. La sociedad azteca estaba dividida en tres clases: esclavos, plebeyos y nobles. El estado de esclavo era similar al de un criado contratado. Aunque los hijos de los pobres podían ser vendidos como esclavos, solía hacerse por un período determinado. Los esclavos podían comprar su libertad y los que lograban escapar de sus amos y llegar hasta el palacio real sin que los atraparan obtenían la libertad inmediatamente. A los plebeyos se les otorgaba la propiedad vitalicia de un terreno en el que construían su casa. 
Sin embargo, a las capas más bajas de los plebeyos, no se les permitía tener propiedades y eran campesinos en tierras arrendadas. Los aztecas utilizaban la escritura pictográfica grabada en papel o piel de animales. Todavía se conserva alguno de estos escritos, llamados códices. También utilizaban un sistema de calendario que habían desarrollado los antiguos mayas. Tenía 365 días, divididos en 18 meses de 20 días, a los que se añadían 5 días ‘huecos’ que se creía que eran aciagos y traían mala suerte. Utilizaban igualmente un calendario de 260 días (20 meses de 13 días) que aplicaban exclusivamente para adivinaciones.




Colonización Europea.
La llegada de los europeos a las costas de Africa austral fue sin discusión la experiencia más traumática enfrentada por las comunidades autóctonas. En 1652, los holandeses fueron los primeros en abrir una sucursal de su Compañía de las Indias Orientales en el continente africano, para abastecer a los barcos de alimentos, agua y atención para los marineros enfermos. Probablemente se hubieran conformado con esto si la sucursal hubiera bastado para satisfacer todas estas necesidades, sobre todo, la provisión de carne y granos.
La Compañía tenía tal necesidad de mano de obra que en la primera década de asentamiento trajo esclavos de su imperio oriental y de regiones a ambos lados de Africa. El esclavo no tenía derecho legal alguno, y a diferencia de los esclavos de América, muy pocas posibilidades de alcanzar la libertad mediante su conversión al cristianismo. En el Cabo, la liberación obligatoria de los conversos sirvió de impedimento a la conversión al cristianismo y volvió más atractiva la conversión al islamismo por razones no solo religiosa sino también política. Los esclavos de la Compañía o los residentes en los pueblos tenían cierta posibilidad de practicar oficios. Los esclavos de los granjeros estaban bajo un control más estricto. Las esclavas no tenían la opción del matrimonio, pero sí era frecuente el concubinato con hombres blancos.
El Cabo se convirtió en una sociedad dividida en grupos claramente definidos desiguales ante la ley, y los negros libres nunca fueron lo suficientemente numerosos o fuertes como para romper las barreras. Los empleados de la Compañía y los granjeros blancos establecieron un predominio defendido por la ley y reforzado por la libre inmigración. Los blancos mantendrían su predominio por más de tres siglos y medio, pese a varios intentos de emancipación. En 1807 y 1838 se produjeron intentos parcialmente exitosos por liberar a los esclavos. Los británicos habían tomado ya posesión del Cabo durante las guerras revolucionarias francesas, manteniéndola como colonia a partir de 1795, con un breve período de dominación holandesa entre 1803 y 1806. La dominación británica fue inicialmente casi tan autoritaria como la holandesa. Pero los nuevos colonos que llegaron a partir de los 1820 traían su experiencia en las luchas políticas inglesas, y en la colonia lucharon por alcanzar libertad política, primero con una exitosa campaña en favor de la libertad de prensa, y luego en 1853 con el establecimiento de un gobierno representativo en unas elecciones increíblemente limitadas y daltónicas. Otro tipo de campaña lanzaron grupos de presión en Gran Bretaña con respaldo de los misioneros locales para liberar a los siervos y esclavos. 
Aunque se trataba de un intento por equilibrar la libertad con la necesidad de mantener a los emancipados como mano de obra asalariada, no recibió mucho apoyo por parte de los empleadores locales. De ahí que aunque los khoikhoi obtuvieron una "carta de libertad" en 1828, y en 1838 los esclavos fueron puestos en libertad al cabo de cuatro años en calidad de "aprendices", las presiones de los empleadores en los tribunales frustraron en gran medida la eficacia de ambas medidas.

El Comercio en Quininde.

La Palma, principal fuente comercial de Quininde.

La principal fuente de comercio en Quinindé es la Palma Africana, seguida de los insumos agrícolas como la Uria, Insecticida, Lifosatos, centros de acopio de los productos de la zona, extractoras de plantaciones, etc. (referente a la agricultura).
En el comercio Genera tenemos las tiendas de abarrote, tercenas, centros comerciales como Tia, Aki, los almacenes de electrodomésticos, mercado de mariscos, el mercado central.





Centros de acopio de productos de la zona.

 
Recolección del Cacao para la venta.


Local comercial ubicado en la Bahía de Quininde.


Cabe señalar que parte del circulante generado de  nuestro Cantón es llevado a otros lugares del país.